Meditación y Chi Kung
La Meditación
permite sentir la caricia del Tao en nuestro interior. Esa es la Vida que pretende el Maestro influir, en favor de la armonía original, con sus agujas. Si el flujo del Chi es débil, poco podemos hacer con una terapia antigua que pretende sanar de una forma tan natural. Incrementar y cuidar día a día esa caricia, nos entrega un contenido intenso para estimular con la sabiduría del diagnóstico. Los rincones del cuerpo que esconden el significado de los cinco elementos, son ordenados tras la sugerencia de las agujas, colocadas en el momento y lugares apropiados. Cuidar y fundirnos en el sentir dichoso que nos hizo nacer, implica llenarnos de fuerza y salud mientras nos acostumbrarnos a él. Permanecer jornadas en su paz, nos entrega plenitud y equilibrio emocional. Esa armonía que nos hizo nacer y nos define más allá de nuestra identidad creada, nos guía a través del instinto toda nuestra vida.